Otra vez se acerca el momento en que los aficionados del fútbol llenan los bares de la ciudad para ver la Eurocopa 2016. A partir del 10 de junio al 11 de julio de este año los seguidores de las 24 selecciones europeas participantes llenarán las calles de 10 ciudades en Francia. Ya sea que seas un fanático del futbol o prefieras visitar los monumentos, estos diez destinos tienen tanto ver que nadie va a querer sentarse en la banca.
Lille
Disfruta de la arquitectura de influencia flamenca de Lille
La simpatía que caracteriza a los franceses del norte, la gran influencia Flandes y la cultura picarda (o chti) hacen de Lille una ciudad que vale la pena visitar. Para disfrutar de toda una experiencia auténtica tienes que visitar el barrio de Wazemmes, donde vas a encontrar un montón de bares y salas de conciertos, puestos de comida al aire libre junto al Halles de Wazemmes y la bonita plaza de Casquette, con pista de petanca incluida.
La cerveza está muy presente en la cultura del norte de Francia. En Lille, locales legendarios como 3 Brasseurs sirven cervezas artesanales acompañadas de especialidades gastronómicas de esta zona del país como flammekueche con Maroilles (una fina masa de pan con queso oloroso). Mother es el bar hip al que tienes que ir para ver los partidos en pantallas gigantes en un local con una decoración muy cool.
Saint Denis
La catedral de Saint Denis, de aspecto tan grandioso como el Stade de France, te sorprenderá por su belleza y tamaño
Saint-Denis, muy cercana a París, se asocia principalmente al estadio Stade de France y puede que no esté en tu lista de destinos que visitar en Francia. Sin embargo, la ciudad tiene un par de lugares interesantes que ver, como la basílica de Saint-Denis. Esta iglesia de estilo gótico y llena de impresionantes vidrieras es también el lugar donde yacen los restos de numerosos reyes franceses de los siglos X-XVIII. Otro lugar que vale la pena ver entre partido y partido es La Fabrique de la Ville, un museo de historia urbana y zona de excavación arqueológica con forma de champiñón donde aprenderás sobre la historia de Saint Denis.
Si quieres irte de compras visita el mercado un martes, viernes o domingo por la mañana. También puedes ir al centro comercial Marque Avenue si buscas ropa de marcas comerciales.
Saint Étienne
El diseño y la tradición se mezclan en la Cité du Design de Saint Etienne
Saint Étienne es una de las ciudades subestimadas de Francia, pero esta antigua ciudad minera esconde varios secretos. Desde 1998 la ciudad celebra bienales de diseño y en 2009 se restauró la antigua fábrica de armas y se integró en el proyecto de la Cité du Design. Entre otros lugares de relevancia arquitectónica se encuentran Ilot Gruner, un edificio de oficinas con una llamativa fachada amarilla y Le FIL, una sala de conciertos y eventos muy popular. Todo esto ha contribuido a que Saint Étienne haya sido reconocida como “Ciudad del Diseño” por la Unesco en el 2010.
El estadio Geoffroy-Guichard también ha sido renovado para la Eurocopa 2016, que permitirá a 42 000 espectadores disfrutar de los partidos. Si quieres unirte a la gente local en los bares de la ciudad date una vuelta por las calles peatonales del centro, como Rue Martyrs de Vingré y entra en alguno de los bares donde puedas ver los partidos.
Lens
El museo Louvre-Lens es una visita imprescindible en tu próximo viaje a Lens
Con un pasado histórico como ciudad minera, hasta hace poco el principal atractivo turístico de Lens eran los gigantescos montículos de material extraídos durante las excavaciones, que son patrimonio de la humanidad. Sin embargo, con la apertura en 2010 del museo Louvre-Lens, el edificio anexo y descentralizado al Louvre de París, atrae a amantes del arte y curiosos, haciendo de este lugar un “must” que visitar en la ciudad de Lens. También puedes darte la vuelta por el centro de Lens y disfrutar de la arquitectura de estilo art déco.
El estadio Bollaert-Delelis se ubica a solo 15 minutos a pie del centro, así que sentir el ambiente de la Eurocopa 2016 es inevitable. Fue nombrado mejor estadio de Francia en 1992 por acoger a 48,912 seguidores, una cifra que supera la población de la ciudad!
Burdeos
Observa tu reflejo en la fuente Miroir d’Eau de la Plaza de la Bourse en Burdeos
A orillas del río Garona se encuentra la hermosa ciudad de Burdeos, patrimonio de la humanidad por la Unesco. Es una ciudad que se recorre mejor en dos ruedas, así que renta una bicicleta y pedalea por el Cours de l’Intendance para contemplar el Grand Theâtre, tanto desde afuera como adentro. Haz una pequeña parada para tomar café y probar los famosos pasteles de caramelo canelés bordelais en Canelés Baillardran antes de atravesar la ciudad para ver la campana de Grosse Cloche, que aparece en el escudo de Burdeos.
Si por la tarde no estás viendo algún partido en el nuevo estadio de Burdeos (conocido como Matmut Atlantique), disfruta del cielo nocturno de la ciudad en el reflejo de la fuente de la Place de la Bourse o date una vuelta por algún bar del barrio de Capucins-Victoire para ver cómo va el partido del día. Otra buena idea es compartir un buen vino de Burdeos en La Guinguette Chez Alriq, un bar al aire libre con zona de baile en Port Bastide.
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Lyon
Lyon es un destino con rincones preciosos, desde la Place Bellecour a la basílica de Notre-Dame de Fourvière
Dicen que Lyon tiene tres ríos: el Ródano, el Saona y el vino Beaujolais. En cada calle del centro histórico o el área de Croix Rousse encontrarás bares y los restaurantes típicos lioneses llamados bouchons, que suelen tener vino Beaujolais , ideal tanto para aficionados al fútbol como para los amantes de la buena comida mientras ven los partidos de la Eurocopa 2016. Acompáñalo de especialidades lionesas como las quenelles (un tipo de empanadas de pescado) o cualquier plato de cerdo porque, según los lioneses, “Tout est bon dans le cochon” (Del cerdo todo es delicioso).
Para alejarte un poco del ruidajo organiza un picnic a orillas del Ródano o callejea por las traboules (túneles casi secretos que comunican distintas calles en el centro historico). Disfruta de buenas vistas desde la Esplanade de Fourvière (la plaza de la basílica) o intenta encontrar a Bernard Lacombe (entrenador de fútbol) en los Frescos de Lyon.
Marsella
Cuando veas el Vallons des Auffes no vas a querer irte nunca de Marsella
Para la gente de Marsella el fútbol es casi como una religión. Tanto es así que una ofrenda del Olympique de Marsella ha sido bendecida en la basílica de Notre-Dame de la Garde, conocida como La Bonne Mère («la buena madre») y ubicada cerca del puerto antiguo. Es el único equipo francés que ha ganado la UEFA Champions League en 1993, ¡así que tienen motivos para estar orgullosos!
Si no sabes qué hacer en Marsella, camina sin rumbo por las calles históricas del barrio de Panier y sube por la mítica Montée des Accoules hasta el fuerte de Saint Jean, desde donde vas a poder cruzar hasta el museo MuCEM por un puente recién construido. Disfruta del ambiente relajado típico de las ciudades portuarias del sur de Francia en las azoteas de las Terrasses du Port o únete a los seguidores del Olympique en Le Bar du Marché y tómate un pastis (bebida de anís típica) bien frío en un ambiente agradable.
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Niza
Sol y monumentos, la combinación perfecta durante una visita a Niza
Esta ciudad costera del sur es el destino de playa preferido tanto de muchos franceses como de visitantes internacionales. Recorre el emblemático paseo marítimo Promenade des Anglais, ‘La Prom’ para la gente local, y siente el ambiente costero bajo el sol. En cuanto a playas, puedes escoger entre las de arena o las de piedras, públicas o privadas, o pasar de la playa e ir directamente al bar Wayne’s para ver los partidos de la Eurocopa 2016.
El centro histórico es uno de los principales atractivos de Niza. Sus estrechas y coloridas calles son ideales para perderse. Sigue la campana de la catedral de Sainte-Réparate; te llevará hasta Fenocchio, una heladería donde podrás probar helados de jengibre, tomate y albahaca o la especialidad local Tourte des blettes (un tipo de pastel dulce hecho con una verdura local similar a al espinaca). Si buscas un poco más de aventura puedes cruzar la frontera italiana, a tan solo 40 minutos en coche. También puedes hacer una excursión por la zona y visitar Cannes, Fréjus o Saint-Tropez.
Toulouse
El color de los ladrillos en la Place du Capitole de Toulouse es el motivo del apodo “Ciudad rosa”
Al igual que Burdeos, Toulouse también se encuentra a orillas del río Garona, aunque poco más tiene que ver con Burdeos. Conocida como la “Ciudad rosa” por el color de los ladrillos de muchos de sus edificios, Toulouse tiene muchos lugares que valen la pena visitar. Aunque el rugby es el deporte estrella en el sur de Francia, el fútbol tampoco se queda atrás y puedes unirte a los aficionados locales en bares como Mulligans, ubicado en Grand rue de Saint Michel a solo 20 minutos caminando del estadio Stadium Municipal.
Lo primero que hay que hacer en Toulouse es admirar la belleza de la Place du Capitole y el suelo con la cruz occitana, antes de ir al mercado de Victor Hugo a saborear de los productos frescos del mercado que sirven en los restaurantes de la zona. Una visita a Toulouse no esta completa sin haber probado el confit de pato, acompañado de un buen vino Gaillac.
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París
Date una vuelta por la Promenade Plantée sobre el jardín de Reuilly en un día de verano en Paris
No te confundas por el nombre, en el estadio de Parc des Princes no te esperará ningún príncipe. Tal vez tengas más suerte si te das la vuelta por el animado barrio de République, donde podrás encontrar muchos bares y bodegas en los que hacer amigos locales. Durante el verano la gente suele organizar picnics en el canal de Saint Martin y escuchar a los músicos callejeros que tocan durante toda la noche. Hay muchos pubs en París donde podrás ver los partidos de la Eurocopa 2016 en pantalla gigante, pero lo mejor para unirte a los fanáticos de la ciudad son los bares de Grands Boulevards.
Si buscas algo más tranquilo, date una vuelta por la Promenade Plantée, también conocida como Coulée Verte René-Dumont, la cual te lleva por encima del Viaduc des Arts, y por detrás de la Ópera Bastille hasta Vincennes. Un descanso en el jardín de Reuilly hará que te olvides del fútbol, hasta que algún grupo de niños aparezca con la pelota.
